En esa lista de posibles faltas tú, Sigfried.
Yo empiezo a pensar que solo queda uno, que tiene que ser Pi. Si mañana sigue la partida tengo un problema porque no sé quien podría ser.
Yo, como voy a morir igualmente pido ir a la iglesia, total la posible arma que me pudiera dar Sigfried no me va a servir para nada. Por lo menos escaneo a alguien.