Enhorabuena a los aldeanos por cazar a los lobos.
Y agradecimientos a Horak por la partida.
Una partida que ha sido un poco rara. Sigo sin saber la razón por la que Sigfried no hizo nada por salvarse, con lo cual los lobos hubieran tenido muchas más opciones.
Respondiendo a Ug, no hablé condicionado por ti. Hablé porque era un muerto viviente. Teníais 3 motivos para matarme:
1) Ser la vidente suicida.
2) Evitar que contara todo lo que sabía y que provocaría la caída del último lobo.
3) Evitar que usara mi oficio (cosa que tenía que haber hecho matando bien a Fisolofo, y Pi caía al día siguiente, bien a Pi).
Por lo que parece, ya sabíais mi rol antes de que hablara. Fallasteis el tiro sabiendo que era 1 de 2 roles.
Seguro que me dejo algo, pero ya me acordaré (o no)