Pues mira, Gestas, Pi me preguntó qué tal por el cementerio, le conté lo que había y que me había vuelto a salir una carta de cementerio, pero que pasaba de ir y perder cordura por encontrar un objeto. Pareció interesado en ir él y le pasé la carta de cementerio. Si llego a saber esa información, me guardo la carta aunque ello significase limitar mis movimientos.